viernes, 12 de julio de 2013

Bretón, sangre fría y ¿machismo?

Esta tarde el programa de La Ventana en La Cadena Ser abría, como no podía ser de otra forma en estos día, con el caso de José Bretón. Lejos de analizarlo todo desde el punto de vista morboso se le ha abierto un debate en torno a lo sociológico del tema, algo que me parece genial. El problema viene cuando Carles Francino, el conductor, lanza la pregunta ¿es esto un caso de violencia machista? A lo que quedo atónito cuando todos los colaboradores dan esto por supuesto.
Lo confieso, soy demasiado puntillita con los términos y me gusta afinar al máximo en este sentido, así que vamos a empezar.

La violencia machista es un tipo de la violencia de género, y se da solo en el caso en que el hombre se sienta superior a la mujer precisamente por su condición de ser hombre. Dado que vivimos en una sociedad donde el machismo aun impera en algunos sectores, los casos de violencia de género por parte de una mujer son raros. La violencia de género va de la mano de los cambios culturales y son un reflejo de la sociedad, algo que podemos cambiar entre todos, que no tiene nada que ver con la naturaleza del ser humano y que con educación se corrige. 


Por lo tanto debemos pararnos a analizar otro término a menudo disperso en los medios de comunicación, violencia doméstica. Este se acuña para distinguirlo de otro tipos de violencias, como la callejera o la terrorista (la aclaración es necesaria). Por lo tanto si el hecho violento se enmarca dentro del ámbito familiar es violencia doméstica. Y aquí entran todo tipo de motivos: venganzas, crímenes pasionales, problemas de custodia, de dinero, drogadicción, alcoholismo… En estos casos se diluye por completo el género y puede ser cometido en igualdad de condiciones tanto por hombre como por mujeres. Por lo tanto vivamos o no en una sociedad sexista estos casos se seguirán dando porque está en el ser humano, salvaje y visceral.

Por lo tanto ¿es el caso de José Bretón un caso de violencia machista? No, bajo mi punto de vista, el asesino cometió el crimen para poder vengarse de su pareja, lo cual no va ligado al sexo de José Bretón. Según rezan los “analistas” Bretón se sintió abandonado y mató a sus hijos para dañar a la madre. Si hubiera sido una mujer, el crimen se hubiera cometido igual, si hubiera sido una pareja homosexual, los niños también estarían muertos. Es más, este tipo de crimen ya se había dado antes en mujeres.


Así pues, mi única intención es identificar bien que es violencia machista, ya que así se puede atacar de una manera más contundente. Si extendemos el término sin control, no solo estamos creando un problema donde puede que no lo haya, también estamos dando la espalda al verdadero problema. 

miércoles, 14 de noviembre de 2012

#SoyPeriodista


Sí, hoy he estado en la manifestación con motivo de la huelga general, sin estar de acuerdo con dicha huelga. El sistema de una huelga general para solucionar el gran problema que tenemos los ciudadanos me parece un sistema obsoleto y arcaico.
No obstante me parece interesante que distintos colectivos que no son escuchados de ninguna de las maneras se echen a la calle a reivindicar derechos que un gobierno ignora. Gobierno que aunque haya sido elegido por mayoría absoluta no tiene el poder (o no debería) de aplastar a las minorías que no le han votado. Es más tiene el deber de escucharlas y en la medida de lo posible satisfacerla.
Hoy he ido a la manifestación asqueado de las banderas de los hipócritas de los sindicatos mayoritarios. Es más, simbólicamente el sequito de Torrijos y Valderas me han llegado a empujar porque iban buscando la pancarta de la cabecera para hacerse todos la foto juntitos como hermanos. He sentido asco.
Entonces ¿por qué he ido?
Hoy había un grupito de gente detrás de una pancarta no muy grande, un grupito con personas de todas las edades, jubilados, familias, estudiantes... banderas sindicalistas pocas, por no decir ninguna. En la cabecera un señor muy serio con una pipa que no se ha movido todo el tiempo de su sitio. Ese hombre era Rafael Rodríguez Guerrero y las camisetas blancas que lucían casi todo ese grupito rezaba el lema Soy Periodista.
Paradigmáticamente somos probablemente el colectivo al que menos voz tenemos. Entre otras cosas porque ser la voz del puedo implica dejar de ser la voz de nosotros mismos.
Los periodistas hoy en día están secuestrados por los intereses empresariales los dueños de los medios, que ven la información como una mercancía y no como un elemento clave en nuestra democracia.
No se equivoquen que intereconomía y la sexta radicalicen su discurso no es por moralidad, es por audiencia.
No tenemos voz porque no hay medio que quiera sacar en sus páginas los despidos bestiales que está teniendo el periódico de al lado porque es probable que ellos mismo hagan un ERE la semana que viene.
Mientras tanto cuantos millones se van en programas absurdos, en prensa del corazón y en el sueldo de los columnistas estrella.
Hoy he ido a la manifestación del 14N y me he asqueado de casi mucha gente las vaderas de UGT, CCOO, CGT… pero me he sentido orgulloso de que a pesar de eso ha sido la primera vez en mi vida que en una manifestación convocada por ellos había casi el mismo número de sindicatos minoritarios que de chuposteros.
Y es que hay veces que para que te escuchen hay que vender un poco tu alma al diablo, aunque sea una vez al años.
Por cierto la cadena Ser ha nombrado a todos los colectivos asistente a la manifestación llevo desde esta mañana escuchando la radio y aun no he escuchado nada sobre periodistas.
En mano de estos intereses está nuestras sociedad.
Sin Perioditas No hay Periodismo, sin periodismo No ha Democracia.

jueves, 12 de julio de 2012

Cidade de Deus

En lo que llevamos de semana en Sevilla se ha producido el desmantelamiento de dos asentamientos chabolistas ocupados por gitanos rumanos.
En total se han encontrado a 157 personas de los cuales 8 eran menores, viviendo entre más de 100 toneladas de basura.

157 personas educadas en una sociedad y en unos valores sin patria ni ley, donde las mujeres son un rango inferior y los niños solo una pieza más para ayudar al trabajo.

Una sociedad nómada excluida durante siglos que se ha encerrado en sí misma, y que no sabe superar esa exclusión, como ya hicieron muchos gitanos españoles integrados totalmente en nuestra sociedad.
Donde vivir entre la basura no es que sea algo de gusto, pero es lo que aceptan a tener, porque según muchos (no todos gitanos) el racismo no les deja más, y en esto serán educados esos 8 menores, y los que están por venir.

Nadie les asegura una escuela a esos menores, ni tampoco a los adultos.

Y la cuestión no es que nadie se lo asegure, es que tampoco nadie les obliga a aceptar las normas que todos los demás cumplimos. Normas que no afectan a nuestra sociedad, sino cuyo beneficio solo repercute en ellos mismo. Nosotros con no acercarnos tenemos bastante, pensamos cínicamente.

Nadie les obliga a cuidar la salud y la educación de sus hijos, ni si quiera la de ellos mismos.

Así poco a poco los asentamientos chabolistas se van convirtiendo en aquella Ciudad de Dios donde padres sin pasado e hijos sin futuro ven en la delincuencia y la violencia algo normal.

No es más que fruto de una sociedad sin educación. 


    

lunes, 4 de junio de 2012

La educación del miedo


Alfonso Lazo reza en su Decálogo el Insumiso que ‘gente aterrorizada es gente manipulada’. Y eso de manipular a muchos se les antoja un placer muy dulce en estos tiempos tan difíciles.
En toda la comunidad universitaria sevillana, que últimamente está tan en boca de todo el país, solo hay un género de persona igual de peligroso que aquellos que aun creen en la lucha de clases, igual de peligroso que aquellos que hace 34 años se lamentaban de los resultados del referéndum más importante de nuestra historia y juraban defender en sus clases la sombra del árbol caído que antes les cobijaba.
Estoy hablando de los amantes del miedo.

Aquellos que utilizan el miedo para alcanzar notoriedad y, peor aún, se creen sus propias teorías. Esto se viene dando desde hace años en toda la comunidad universitaria, donde entidades como el sindicato de estudiantes lleva avisando de la privatización de la universidad desde casi antes de que existiera. Lo peor es que ahora se les llena la boca con un absurdo ‘os lo dijimos’. Puedo pronosticar mi propia muerte para mañana todos los días de mi vida y el día que suene la flauta (que sonará), yo bajo tierra reiré el último.

Ahora le toca a algo tan antiguo como las sociedades democráticas y el pensamiento ilustrado: la censura. El pensamiento de que en democracia no hay libertad de expresión es algo que muchos nos conocemos desde hace mucho tiempo. Desde el ámbito más intelectual y teórico de Adorno, Marcuse o Mattelart, hasta aquellos que en la calle le tapan la boca a las estatuas en señal de protesta o recalientan el motor de su ordenador en las candentes redes sociales. Todos y cada uno de ellos juegan con el miedo, porque le tienen miedo a aquellos que juegan en su contra, porque no son capaces de hacerles frente a aquellos que en democracia tienen mejores armas, aunque no siempre más ganas de ganar. Es como decir que están haciendo trampa cuando de momento se torna la partida en tu contra.

La moda, hablar de la censura en los medios convencionales y sobre todo en twitter. Y la norma, hablar sin pruebas, solo con los hechos, nunca con el por qué. Si no vemos el ruido que estamos haciendo en las noticias el mismo día que se hace, todo ya es culpa del opresor. Si nos cierran una cuenta en twitter una y otra vez sin darnos explicaciones, vuelve a ser esa mano negra que nos manipula y nos estruja con el yugo de los imperios. Así se genera miedo, así se genera la verdadera manipulación.

Empezamos por el tema de los medios convencionales, un tema recurrente en las asambleas de alumnos convocadas durante el parón académico. No existe tal silencio. Todo el movimiento estudiantil sevillano comenzó a salir en los medios de este país cuando se tomó la decisión de el parón y a raíz de esto ha habido un seguimiento lógico de las actuaciones. Es algo que el CADUS tiene claro y que hace tiempo en las asambleas se ha dejado de denunciar. Si esto no se informa diariamente es porque vivimos en un país al borde del rescate y con cinco millones de parados. Tenemos que aceptar que aunque esto sea vital hay cosas más importantes. Aun así, por nosotros se han interesado medios como Al-Jazzera o la BBC. Está pasando y se cuenta. Solo hacía falta pasarse por las asambleas del CADUS que tan orgusamente defiende más de uno que ni siquiera han pisado.

En segunda línea de fuego se encuentra otro tema mucho más llamativo: la censura en twitter. El hecho es el continuo cierre de la cuenta @sevillpara y sus sucesores.

Lo cierto es que no se por qué se están cerrando esas cuentas, ya que twitter no ha dado explicación alguna, o al menos eso nos han dicho. La nueva política de censura en twitter, por la cual se generó una huelga de silencio, reza lo siguiente: cuando se ejerza la censura sobre una cuenta o twitt se comunicará públicamente el motivo de esta, y cuando sea eliminado algún contenido de la red social se bloqueará en la jurisdicción pertinente y de acorde a las leyes del estado; en el resto del mundo se podrá seguir viendo.
Esto es algo que en este caso no se ha dado.

No se ha comunicado el cierre de la cuenta, y el contenido se ha borrado a nivel global. O twitter falla o lo mismo hay otros motivos diferentes para el cierre de la cuenta. 
Aun así, no descarto la posible mal intención de unos cuantos, y si esto fuera así antes de hablar de censura deberíamos preguntar el por qué y si la respuesta no convence entonces denunciar. Si esto es un caso de censura no deberíamos tener miedo, aunque twitter es una empresa privada que gestiona los contenidos de manera autónoma, ningún tribunal del mundo puede negar que se ha convertido en un canal de transmisión importante y que no atenerse a la libertad de expresión les puede costar caro. Por eso mismo todas las redes sociales cambiaron sus políticas de censura de acorde a la ley de aquí a unos años atrás.

La clave está en no disparar sin preguntar, porque de lo contrario se puede generar miedo donde no debe haberlo.

Ante el miedo nos convertimos en gente sumisa y acabamos con nuestro pensamiento libre. Somos presa del pánico y damos coletazos como un pez fuera del agua creyendo que esto es un acto de rebeldía, cuando no son más que estertores de muerte.

Y sería una pena que todo esto muriera, pero no tiene remedio, pues ya nació de mucha gente más propensa aterrorizar que a informar.

Lo que está ocurriendo en este país es demasiado importante como para caer presas del pánico. Hay motivos para temer, pero no son estos. Conocer cuáles deben ser nuestros temores es el primer paso para derrotarlos.

No caigáis en la sumisión, no seáis presa de aquellos que intentan manipular a la masa para su beneficio propio. Algunos que incluso estaban en desacuerdo con el gran movimiento ahora rinden pleitesía y se hacen notar en las redes. Porque en Sevilla si tus ideas no tienen la aprobación de #SevillaPara, eres un reaccionario.

Y lo dice una persona que ha estado dentro del movimiento todo lo que ha podido y que está totalmente en contra del asalto intolerable a nuestra universidad.

Pero esto solo se consigue siendo libres.

Y si en algún momento esta libertad os pesa recordad a Alfonso Daudet: El lobo se come a la cabra del señor Seguin, pero al alba, después de que la cabra luchara toda la noche. Si hemos de caer que sea a la salida del sol.